
El espíritu May Kondo hay que mantenerlo todo el año. Quien dice mantenerlo dice saber que existe, aunque no se practique en exceso. Por eso voy a ayudaros a hacer como que ordenáis vuestros ordenadores aunque la mayor parte de nosotras practiquemos el EsKondo: dícese de aquellos que hacen limpieza escondiendo o metiendo en un armario de Mónica todo aquello que no queremos tener a la vista, porque nos estropea los chacras, pero que no nos apetece ni un poco ordenar. Es así, somos humanas y recoger da muchísima pereza.